Un miquixtli para Almeyra

Conjugar las tradiciones culturales de nuestro pueblo y la vida militante nos implica retos que pueden asumirse colectivamente. Abrevamos en nuestras raíces indígenas y comprendemos el pensamiento universal a partir del intercambio de ideas y del conocimiento de las luchas de los pueblos y de quienes asumen el compromiso de conocer para transformar la realidad. Por eso es que cuando nos pidieron una calaverita para recordar a nuestro querido camarada Guillermo Almeyra, quien murió recientemente a sus 92 años de edad después de toda una vida de militancia, recuperamos algunas imágenes que ahora les compartimos a través de estas líneas, trabajadas con las observaciones pertinentes, en éstos días de lluvias intensas de octubre.
Toda una vida militante terminó
cuando Guillermo Almeyra su última batalla libró/
La muerte lo acompañó en su travesía al inframundo
luego de intensa vida en este mundo/
En vida impactó por debatir ideas
y con entereza asumió el final de sus días/
Entre la vida y la muerte supo cruzar el umbral
con toda la dignidad en su mensaje final/
Fue una lumbrera del pensamiento
y ya descansa en el panteón dejándonos sin aliento/
Escuchamos con alegría sus planteamientos
y con tristeza lamentamos sus sufrimientos/
Enfrentó en más de una ocasión
la muerte con firmeza y convicción/
Asumió que el futuro es como una canción
construyendo el socialismo con dedicación/
Las tareas militantes asumió con atención
siempre abriendo las puertas de su corazón/
Su epitafio de militante crítico y documentado
es ya nuestro profundo legado/
Con un proletariado organizado
sabía posible un futuro emancipado/
Valoramos con cariño su último mensaje
de un histórico personaje
que sólo se nos adelantó en este largo viaje/
Fue un internacionalista proletario
que hoy yace en el panteón revolucionario/
Guillermo Almeyra querido camarada
desde el miquixtli tu memoria será recordada.